Garantizar que el estado de conservación de las mercancías y alimentos perecederos lleguen al consumidor en un óptimo estado es una preocupación constante y un fin que persiguen todos los estamentos implicados en la cadena de distribución alimentaria, ya sean los productores, los distribuidores o el comerciante final. Es por ello por lo que las empresas de transporte de mercancías, como puede ser un ejemplo la empresa Cargolink, se preocupan por adquirir vehículos acondicionados, de acuerdo al tipo de transporte y al tipo de mercancías que deben portar.
Y es que si se rompe la cadena de frío, puede ser que el alimento deje de ser apto para el consumo. Por ello y con el objetivo de facilitar el transporte de mercancías perecederas, los vehículos destinados al transporte terrestre de productos alimentarios a temperatura regulada deben de cumplir unas especificaciones técnicas y dependiendo del tipo de mercancía perecedera que vaya a transportar los vehículos se clasifican en:
– Vehículo isotermo: es un vehículo cuya caja está construida con paredes aislantes, con inclusión de puertas, piso y techo, que permiten limitar los intercambios de calor entre el interior y el exterior de la caja, de tal modo que el coeficiente global de transmisión térmica, denominado coeficiente K, permita clasificar a los vehículos en una de las dos categorías siguientes:
– Vehículos isotermo normal.
– Vehículo isotermo reforzado. Este tipo de vehículos se caracteriza por presentar un mayor grosor de las paredes de la caja, lo cual le permite aumentar la capacidad de aislamiento.
– Vehículo refrigerante: se trata de un vehículo isotermo que, con ayuda de una fuente de frío, como puede ser por ejemplo el hielo hídrico, con o sin adición de sal; placas eutécticas; hielo carbónico, con o sin regulación de sublimación; gases licuados, con o sin regulación de evaporación, etc., distinta de un equipo mecánico o de absorción, permite bajar la temperatura en el interior de la caja vacía y mantenerla después con una temperatura exterior media de + 30º C. Dependiendo del grado de mantenimiento de esta temperatura, se clasifican en:
-Clase A: a +7º C como máximo.
-Clase B: a -10º como máximo.
-Clase C: a -20º como máximo.
-Clase D: a 0º como máximo.
– Vehículo frigorífico. Es un vehículo isotermo provisto de un dispositivo de producción de frío individual o colectivo para varios vehículos de transporte (grupo mecánico de compresión, máquina de absorción, etc.) que, a una temperatura exterior media de +30 º C, permite bajar la temperatura en el interior de la caja vacía y mantenerla después de manera permanente de la forma siguiente:
-Clase A. Vehículo frigorífico provisto de un dispositivo tal de producción de frío que pueda elegirse entre +12º C y 0 º C, ambos incluidos.
-Clase B. Vehículo frigorífico provisto de un dispositivo tal de producción de frío que pueda elegirse entre +12º C y -10º C, ambos incluidos.
-Clase C. Vehículo frigorífico provisto de un dispositivo tal de producción de frío que pueda elegirse entre +12º C y -20º C, ambos incluidos.
-Clase D. Vehículo frigorífico provisto de un dispositivo tal de producción de frío que sea igual o inferior a 0º C.
-Clase E. Vehículo frigorífico provisto de un dispositivo tal de producción de frío que sea igual o inferior a -10º C.
-Clase F. Vehículo frigorífico provisto de un dispositivo tal de producción de frío que sea igual o inferior a -20º C.
– Vehículo calorífico. Consiste en un vehículo isotermo provisto de un dispositivo de producción de calor que permite elevar la temperatura en el interior de la caja vacía y mantenerla después durante doce horas al menos sin repostado, a un valor prácticamente constante y no inferior a +12º C, siendo la temperatura media exterior de la caja la indicada a continuación, según las siguientes clases:
-Clase A. Vehículo calorífico, para una temperatura media exterior de -10º C.
-Clase B. Vehículo calorífico, para una temperatura media exterior de -20º C.
Independientemente de su clasificación, cualquier tipo de vehículo incluido en la relación anterior deberá llevar obligatoriamente durante la realización del transporte un certificado de conformidad del vehículo, con la fecha en vigor o una placa de certificación que indique el tipo de vehículo de que se trata y la fecha en que vence su autorización para el transporte de mercancías perecederas.
Alimentos perecederos
Por alimentos perecederos se entienden aquellos que comienzan una descomposición de una forma rápida y sencilla, como productos lácteos frescos como la leche cruda cuando es recogida de la granja, yogures, kéfir, nata, mantequilla y quesos frescos, cremas heladas, aceites, carnes y preparados de carnes, incluida la carne picada, caza y despojos rojos, embutidos de todo tipo, pescados y mariscos, frutas, zumos, verduras y hortalizas…